Reseña: Autorretrato, de Celia Paul.

 Tal vez, como seres humanos, seamos bastante propensos a buscar nuestro propio reflejo, a buscar nuestra propia imagen, a ilustrarnos basándonos en lo que somos realmente pero inevitablemente perfeccionándonos. Hoy en día, cada uno confecciona su propio autorretrato con una cámara y filtros que demuestren quiénes somos hoy, si brillamos más o menos, si tenemos rasgos que en realidad nunca tuvimos. Hoy en día, sí, pero si buscamos en el arte (Caravaggio, Rembrandt, Frida Kahlo, Van Gogh), es fácil notar que los autorretratos son una tendencia de siempre.

En "Autorretrato", Celia Paul nos presenta un cuadro rico y complejo de sí misma. A través de su historia, sus recuerdos y la evolución de su arte, nos encontramos con una artista que se encuentra con su reflejo como hija, como madre, como hermana, como modelo y, sobre todo, como pintora. Entre imágenes de sus obras cada vez más personales y genuinas y anécdotas que marcan un antes y después en su vida, reconoceremos un retrato honesto y sensible de Celia.

"Uno de los mayores desafíos que enfrenté como artista y mujer es el conflicto entre que me importe alguien, amar a alguien, y al mismo tiempo permanecer íntegramente dedicada a mi arte."

Queda claro que la pluma de la autora está fuertemente influenciada por las artes visuales, lo que nos regala una prosa descriptiva, detallista y nítida, llena de detalles e imágenes pictóricas que representarán más de lo que aparentan. Con párrafos concretos, Celia logra contarnos su historia sin vueltas ni disculpas, exponiendo sus sentimientos a flor de piel, lo que facilita ponernos en sus zapatos y ver a través de sus ojos.

"Frente a los ojos tenemos una imagen y hay que aferrarla con las manos, sin preocuparse por la armonía y el equilibrio, que de todas maneras surgen solos, naturalmente, de nuestro interior."

Además, el rol de la mujer en el arte es una cuestión que se repite a lo largo de todo el libro, tanto en la narración como en las imágenes que acompañan. Es así que descubrimos cómo las mujeres son puestas generalmente en el lugar de modelos, a merced de la voluntad del artista y objetivizadas, mientras que los hombres no resisten esa incomodidad. Finalmente, es destacable el proceso de la artista para reconocerse como modelo y artista en un complemento poderoso, sin que uno de los conceptos signifique la exclusión del otro.

"Podía ver con claridad cuando las olas se acercaban. Y cuando el mar se las llevaba veía los rastros que dejaban. Pero cuando rompían y el agua estallaba en un caos era imposible ver qué pasaba. Pensaba en eso y pensaba que vivir en el presente puro también era imposible. Aceptaba que era imposible, pero también quería intentarlo."

La lectura me deja una sensación de profundo reconocimiento del proceso de cualquier artista para encontrarse con sí mismo y aceptarse sin culpas. También queda la irrevocable pregunta de cómo sería nuestro autorretrato hoy, qué paleta de colores tendría, qué luces, qué sombras. Y si somos realmente así nosotros, o seguimos escondidos bajo filtros y mentiras.

La Maga.

CELIA PAULCelia Paul nació en 1959 en la India. Estudió en Londres en Slade School of Fine Arts y es una artista plástica reconocida mundialmente. Autorretrato es su primer libro.